top of page
ROSARIO.jpg

PODER DE DIOS

SANTO ROSARIO
 

 

SEÑAL DE LA SANTA
Por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos líbranos señor Dios nuestro
en el nombre del padre del hijo y del espíritu santo
Amén.
 
 
EN CADA BOLA GRANDE SE REZA EL PADRE NUESTRO
Padre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre. Venga a nosotros
tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como
en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona
nuestras ofensas como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden. No nos
dejes caer en la tentación y líbranos del mal.
Amén.
 
 
EN CADA BOLA PEQUEÑA SE REZA EL AVEMARIA:
DIOS TE SALVE, María llena eres de gracia;
el señor es contigo; bendita tú eres entre todas
las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
 
Santa María, Madre de Dios, ruega por
nosotros pecadores ahora y en la hora de
nuestra muerte.
Amén.
 
 
DESPUES DE CADA 10 AVEMARIAS SE DICE:
Gloria al padre y al Hijo y al espíritu santo.
Como era en el principio, ahora y siempre
por los siglos de los siglos.
Amén.
 
 
SE TERMINA EL ROSARIO REZANDO LA SALVE:
DIOS TE SALVE REINA y Madre de
Misericordia, vida, dulzura y esperanza
nuestra. Dios te salve; a Ti llamamos los
desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos
gimiendo y llorando en este valle de
lágrimas.
 
 
EA, PUES, SEÑORA, abogada nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos
misericordiosos, y después de este
destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito
de tu vientre. ¡Oh Clemente! ¡Oh Piadosa!
¡Oh dulce Virgen María! Ruega por
nosotros, Santa Madre de Dios. Para que
seamos dignos de alcanzar las promesas de
Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

LETANÍA:

Señor, ten piedad de nosotros.

 

Señor, ten piedad de nosotros.

 

Cristo, ten piedad de nosotros.

 

Cristo, ten piedad de nosotros.

 

Señor, ten piedad de nosotros.

 

Señor, ten piedad de nosotros.

 

Jesucristo, óyenos

 

Jesucristo, óyenos.

 

Jesucristo, escúchanos

 

Jesucristo, escúchanos.

 

Dios, Padre celestial,

 

ten piedad de nosotros

 

Dios, Hijo, Redentor del mundo,

 

ten piedad de nosotros

 

Dios Espíritu Santo,

 

ten piedad de nosotros

 

Santísima Trinidad, que eres un solo Dios,

 

ten piedad de nosotros

 

Santa María,

Ruega por nosotros.

Vaso precioso de la gracia,

Ruega por nosotros.

Santa Madre de Dios,

Vaso de verdadera devoción,

Santa Virgen de las vírgenes,

Rosa mística,

Madre de Jesucristo,

Torre de David,

Madre de la Iglesia,

Torre de marfil,

Madre de la divina gracia,

Casa de oro,

Madre purísima,

Arca de la alianza,

Madre castísima,

Puerta del cielo,

Madre virgen,

Estrella de la mañana,

Madre sin mancha,

Salud de los enfermos,

Madre inmaculada,

Refugio de los pecadores,

Madre amable,

Consoladora de los afligidos,

Madre admirable,

Auxilio de los cristianos,

Madre del buen consejo,

Reina de los ángeles,

Madre del Creador,

Reina de los patriarcas,

Madre del Salvador,

Reina de los profetas,

Virgen prudentísima,

Reina de los apóstoles,

Virgen digna de veneración,

Reina de los mártires,

Virgen digna de alabanza,

Reina de los confesores,

Virgen poderosa,

Reina de las vírgenes,

Virgen clemente,

Reina de todos los santos,

Virgen fiel,

Reina concebida sin pecado original,

Espejo de justicia,

Reina llevada al cielo,

Trono de la eterna Sabiduría,

Reina del santísimo Rosario,

Causa de nuestra alegría,

Reina de las familias,

Vaso espiritual de elección,

Reina de la paz,

 

 

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

perdónanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

óyenos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

ten piedad de nosotros.

 

 
 
Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies las súplicas que te hacemos en nuestras necesidades, antes bien líbranos de todos los peligros, ¡oh Virgen gloriosa y bendita! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las divinas gracias y promesas de nuestro Señor Jesucristo.
 
Señor, que por el anuncio del ángel nos has hecho conocer la encarnación de tu Hijo, infunde tu gracia en nosotros y concédenos, por la intercesión de la Santísima Virgen María, que podamos alcanzar, por la virtud de la pasión y de la cruz de tu Hijo Jesucristo, la gloria de su resurrección. Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
 
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

bottom of page